¿Qué tienen en común la Juventus y el Mónaco, más allá de que se van a enfrentar en cuartos de final de la Champions League? A finales de la década de los 90’s y principios del nuevo siglo, tres grandes símbolos del fútbol francés defendieron ambas camisetas. Además, estos equipos se enfrentaron en una dura batalla por el pase a la final de la Liga de Campeones de Europa allá por 1998, precisamente el año en que nuestros tres personajes se consagraron campeones del mundo con la selección de Francia.

David Trezeguet. Aunque debutó en Platense de Argentina por sus raíces familiares, la catapulta de Trezegol al estrellato llegó en Mónaco, donde fue durante cinco años uno de los grandes iconos del equipo. En el 2000, tras haber conquistado Mundial y Eurocopa con la selección francesa, fichó por la Juve y allí hizo todavía más grande su leyenda. Fueron 149 goles en diez temporadas con la camiseta bianconera, incluyendo el fatídico año en que penaron por la Serie B.

Thierry Henry. Formado en sus divisiones inferiores, Henry fue todo un referente del equipo monegasco, haciendo su debut profesional recién cumplidos los 17 años y participando en más de 100 partidos antes de ser contratado por la Vecchia Signora. Sin embargo, la estadía de Henry en Turín fue mucho más corta y menos grata que la de su amigo y socio en la delantera francesa: apenas seis meses de escasa participación, antes de marcharse al Arsenal.

Didier Deschamps. El gran capitán francés, el hombre que levantó la Copa FIFA en 1998, tiene un nexo especial con ambos equipos. Deschamps fue parte de la Juve campeona de Europa en 1996 y jugó otras dos finales de Champions con el club italiano. No jugó nunca en el Mónaco, pero en cambio fue en ese equipo donde tuvo su primera oportunidad como director técnico. Estuvo en el Principado entre  2001 y 2005, y en 2006 regresó a la Juventus para llevarlo de vuelta a la Serie A.

Antecedentes. Juventus y Mónaco ya se han enfrentado en instancias decisivas de la Champions League. De hecho, en la temporada 1997-98 se vieron las caras en semifinales, con victoria 4-1 para los italianos en la ida, y 3-2 para los franceses en la vuelta, avanzando así la tropa de Del Piero, Zidane, Inzaghi, Davids y Deschamps a la final de Amsterdam contra el Real Madrid, que eventualmente ganarían los españoles con el célebre gol de Pedrag Mijatovic.