La selección mexicana ya conoce a los tres rivales que tendrá en la primera fase de la Copa América Chile 2015. Las condiciones del grupo están claramente definidas: un gran favorito, el anfitrión Chile; una víctima propicia, la debilitada Bolivia; y una pelea abierta por el segundo boleto entre mexicanos y ecuatorianos.  

CHILE – Los andinos partirán como favoritos no solamente para salir primeros de su grupo, sino inclusive para ganar la primera Copa América de su historia. El equipo de Jorge Sampaoli hizo un gran Mundial y estuvo a punto de eliminar a Brasil de no ser porque el travesaño se cruzó en el camino a la gloria de Mauricio Pinilla. El plantel seguirá siendo prácticamente el mismo que acudió a la Copa del Mundo, con varias estrellas del fútbol europeo como Alexis Sánchez, Arturo Vidal y Claudio Bravo. Una de las generaciones chilenas más talentosas de la historia estará ante una oportunidad de oro de ganar algo importante. Será el partido más difícil para el Tri en la primera fase.

ECUADOR – La única selección sudamericana que no logró superar la primera ronda en el Mundial de Brasil, tendrá un año después su revancha en territorio sudamericano. Los ecuatorianos quedaron a deber a pesar de tener un equipo que despertó la ilusión de toda una nación.  La salida de Reinaldo Rueda ha supuesto el inicio de una nueva era, ahora bajo el mando de Sixto Vizuete y seguramente con la misma base de jugadores que militan tanto en Europa como en México. De hecho, en el enfrentamiento con el equipo de Miguel Herrera el 19 de Junio en Rancagua, coincidirán en la cancha muchas caras conocidas. Y allí podría definirse el pase a los cuartos de final.

BOLIVIA  – Ya son muchos años en los que Bolivia está sumergido en una crisis futbolística de lo que no ha podido salir. Desde mediados de la década de los 90, cuando clasificó a un Mundial y obtuvo un subcampeonato en la Copa América, el equipo verdiblanco no ha podido volver a destacar a nivel internacional. Para rescatar un barco que se venía a pique, había regresado Xabier Azkargorta, quien también llevó al Bolívar a semifinales de la Copa Libertadores. Después asumió como interino el argentino Néstor Clausen, y hoy es día que Bolivia no tiene un técnico oficial. Esa inestabilidad, aunada a un pobre plantel, los coloca como la víctima propicia del Grupo A.