Cuando la tele manda

Érase una vez en la Primera División de México, que la mayoría de los equipos jugaban sus partidos los domingos al mediodía. La razón era simple: un horario completamente familiar para un deporte completamente familiar. Y un factor no menos importante: la oferta de canales de televisión no superaba la decena. De hecho, los propios aparatos y los controles tenían no más de diez opciones para sintonizar algún canal.

Parece que estamos hablando de la prehistoria, pero esto sucedía hace “solamente” 25 años. Aquí una lista de los clubes que alguna vez jugaron en ese horario: América, Guadalajara, Morelia, Puebla, Necaxa, Atlante, León, Pachuca, Pumas y Toluca, éstos dos, los últimos “sobrevivientes” de esa vorágine llamada derechos de televisión que se ha apoderado de los horarios de juego, imponiendo condiciones incluso sobre las directivas de los equipos.

En esa época romántica en la que el fútbol guardaba las tradiciones, el Atlas jugaba siempre los sábados a las 8:45 de la noche, Monterrey y Tigres los sábados a las 5, y Cruz Azul el mismo sábado, pero a las 4. Esto permaneció así durante años y no había que consultar el “TV Guía” para saber a qué hora jugaba cierto equipo. Los dos equipos regios, suponemos que por su poderío económico, han salvado su horario tradicional, salvo por un pequeño ajuste de dos horas en el cual ya llevan más de una década. Pero, ¿alguien se imagina a Rayados jugando un viernes o un domingo?

Santos, Morelia, Veracruz, Puebla, Atlas y Tijuana son los casos más atípicos. O lo que es lo mismo, los equipos de TV Azteca. Algún prócer del rating dijo alguna vez en alguna reunión en el búnker del Ajusco, que habría que idear el concepto de “viernes botanero”. Y en ese preciso instante, inició un desbarajuste de horarios con estos equipos, que han probado ya de chile, mole y pozole en cuanto a sus calendarios como locales se refiere, todo buscando el beneficio de esta televisora.

Tener fútbol en viernes no tiene nada de malo. Pasa en España, en Alemania o en Francia, tres de las mejores ligas del mundo. Pero entonces se impone la categoría de los clubes, y es muy, muy, muy extraño que los mejores clubes acepten un rol de teloneros cuando los días grandes han sido, son y serán, los sábados y domingos, tanto para quienes asisten son asiduidad al estadio como para quienes prefieren engrosar las arcas de las televisoras consumiendo sus contenidos, dentro de los cuales el fútbol juega un papel preponderante. Pero, cuando hay lana de por medio, al diablo las tradiciones. Cuando la tele manda, no hay mucho qué hacer. Y para muestra, los cinco horarios más extraños, desde que irrumpió el cable en nuestras vidas y, posteriormente, la televisión digital.

Toluca, domingo 11:00 Aunque solamente haya una hora de diferencia entre el horario actual y el que tuvieron los Diablos a inicios de la década de los 90. Es insólito, en cualquier liga del mundo, que un equipo juegue antes del mediodía. Ese horario matutino, que se mantuvo por varios años, no hacía más que enfriar la ya de por sí gélida cancha de La Bombonera.

Morelia, viernes 19:00 Si ya de por sí era extraño ver a cualquier equipo jugar los viernes, más lo es en un horario en el que mucha gente apenas está saliendo de sus trabajos. Máxime si ese equipo es el Morelia, cuya afición no se concentra en su totalidad en la capital del estado, pues buena parte de ella llega desde el interior. Tanto los domingos a las doce como los sábados a las siete habían funcionado, pero eso no importó.

Atlas, viernes 21:00 Décadas y décadas de tradición se han ido al olvido. Nunca el Atlas había jugado los viernes. Aquí no importa la hora. Ya el simple hecho de verlos saltar a la cancha del Jalisco en viernes será lo suficientemente extraño. Si alguien considera relevante el dato, los partidos serán a las nueve de la noche. Veremos cómo responde la afición en este horario por demás inusual.

Pumas, viernes 15:00 A mediados de los 90’s, la UNAM decidió programar sus partidos de local en viernes a las tres de la tarde. Y hablando de romanticismo, eran tiempos en los que la base del equipo felino era la cantera: Claudio Suárez, Braulio Luna, David Oteo, “Chiquis” García, Jesús Olalde y el “Iguala” Carreón. El experimento no duró mucho y al final los universitarios regresaron a los domingos al mediodía.

América, lunes 21:00 Alguna vez el América jugó los lunes por la noche, tratando de emular al Monday Night Football de la NFL, pero las entradas en el Azteca no terminaron por darle la razón a esa propuesta, aún cuando aquel equipo ofrecía el suficiente espectáculo para llenar el estadio, pues se trató nada más y nada menos que del América de Beenhakker, que probó ese horario durante algunos partidos en 1994.

Deja una respuesta